lunes, 3 de diciembre de 2012

BMW M6 CABRIO F12


A comienzos de este año, BMW hizo que a todos se nos cayese la baba al mostrar sus nuevos BMW M6 Coupé y Cabrio justo antes del Salón de Ginebra. Ambos modelos llegaban para convertir a la elegante Serie 6 en un coche con un carácter más deportivo y al mismo tiempo en los modelos más prestacionales de la gama BMW.
Teníamos muchas ganas de saber como se comportaba la nueva criatura de M GmbH y más sabiendo que comparte muchas soluciones mecánicas con el BMW M5 que probamos en el mes de mayo (parte 1, parte 2, parte 3 y parte 4) y que tan buen sabor de boca nos había dejado.
Además no olvidemos que este año se cumple el 40 Aniversario de BMW M, cuya historia repasamos en un especial de varios artículos, así que no se nos ocurrió mejor forma de acabar este año 2012 que probando el nuevo BMW M6 Cabrio. En 2009 probamos su antecesor directo, el M6 Cabrio E64. No hablamos de un restyling, sino de un modelo completamente nuevo.



Recuerdo que en el Salón de Ginebra me quedé realmente impresionado cuando vi el nuevo BMW M6 Coupé delante de mis narices. Su carrocería musculosa, los detalles estéticos típicos de BMW M llevados al extremo más radical, el techo de fibra de carbono con doble altura. En conjunto me encantó.
Me pasé más de cinco minutos admirándolo y eso que en Ginebra hay muchos competidores capaces de atraer las miradas de los visitantes. Lo mismo me ocurrió cuando tuve por primera vez delante este BMW M6 Cabrio, me quedé pasmado admirando su espectacular silueta.
El paragolpes delantero de mayores dimensiones que en el modelo normal, ahora integra en su parte inferior una triple entrada de aire que permite refrigerar el motor V8 TwinPower Turbo de 4.400 centímetros cúbicos. Además la forma es más aerodinámica, integrando en los extremos inferiores una especie de flaps que pegan más el morro del coche al suelo cuando rodamos a velocidad de crucero.
Los dos riñones delanteros característicos de BMW son de grandes dimensiones como en el resto de la Serie 6, pero ahora las varillas que lo atraviesan de arriba abajo son dobles y pintadas en color negro, para que los 560 caballos del motor puedan respirar bien cuando se les pide el máximo.
Lo que no me ha gustado mucho es que la insignia M6 que identifica al coche se haya colado en el riñón izquierdo del coche. Hasta la fecha BMW nunca había metido ahí ningún logotipo y es un guiño a las preparaciones alemanas que tanto triunfan en el país centroeuropeo.

Fuente: motorpasion

No hay comentarios:

Publicar un comentario